A lo largo de catorce relatos, Marta Chervin
sorprende con pinceladas de diálogos y descripciones que les permiten a los
personajes manifestarse, soltándose de la mano del narrador. Personalidades
fluctuantes, con altibajos anímicos como en el relato “Reportajes” donde la
periodista es nada menos que Hannah Arendt y las entrevistadas: Evita, Winnie,
esposa de Mandela, y Jiang Quing cuarta mujer de Mao. En “El Galardón”, Mariela,
escultora que resume su vida en la figura de una pieza premiada, o dos
personajes marginales, Luis y Julia en “Más allá de las noticias”, que la autora
suelta sobre la página y se dejan vivir.
La originalidad en la técnica narrativa se manifiesta en el relato “Barca” donde parte del núcleo ficcional, focalizado en un cuadro de Quinquela Martín, es manejado con maestría por la autora, terminan siendo reveladoras a nivel onírico.
U zindzile título elegido para este libro, significa “te reconozco” nombre que dá un líder de la libertad a su hija, quién ve su propia imagen, amparada en este relato, por la que rompe todo mandato de proscripción para conocer, porque también era su verdad, su amorosa verdad.
La autora se mira en estos relatos como quien se mira en un espejo, observa estas criaturas, las reconoce, se reconoce en ellas habiendo transitado tantos caminos para llegar a este, su U zindzale, su verdad amorosa, su juego de muñecas rusas en este aquí y ahora.
Sonia Rabinovich